2 de Agosto de 2013
Con las indicaciones de días atrás de los ferrateros con los que coincidí en la Ferrata de Camaleño, tocaba hoy explorar la segunda parte de la Ferrata de la Hermida, el desvío super aéreo desde la cueva del Diosu. Ya había explorado en 2011 el trazado original hasta la cueva Ciloña.
Esta salida alternativa desde el desvío a la cueva del Diosu no pudo deparar más emociones, trazado super aéreo, siendo las estrellas un primer puente tibetano de 35 m que pone bien las pilas, y un segundo puente de tablas, el de mayor recorrido de España, de 100 m de longitud, a más de 100 m de altura sobre la canal de Canalevia, y no sabría decir a qué altura sobre el fondo del valle, pues no me gustó la idea de distraerme contando metros mientras lo estaba cruzando.
En este artículo de El Diario Montañés cuenta detalles técnicos adicionales: “La vía ferrata de La Hermida tendrá el mayor paso sobre el vacío de España”
¡Una pasada!. Cualquier descripción se quedará corta, hay que vivirlo.
FOTOS FERRATA DE LA HERMIDA (LA HERMIDA, CANTABRIA)
Del trazado hasta la cueva Ciloña encontrarás fotos aquí.
El croquis del trazado hasta cueva Ciloña lo encontrarás aquí.
Aquí empiezan las emociones fuertes, en la cueva del Diosu.
Primer puente tibetano de 35 m, no llevaba 2 m y me día la vuelta, resoplé, me lo pensé de nuevo, y ahora sí, ¡allá voy!
Sí, el puente de mueve, es la naturaleza intrínseca de los puentes tibetanos. Se mueve a pesar de las dos grapas intermedias que tiene.
Disfruté tanto que estuve tentado de volver atrás y repetir. No lo creas del todo, resulta un alivio ver la cueva del Diosu desde el otro lado.
La salida es bastante atlética, hay que tirar de manos.
Continuamos por un tramo algo desplomado, también cañero.
Un respiro no viene mal, en el espolón entre puente y puente …
… porque lo que viene quita el hipo, ¡ m á s c a ñ a !
Un paseito aéreo de 100 m, a más de 100 m sobre la canal de Canalevia.
Lo mires como lo mires, impone.
Por ahí se pierde el puente, en el infinito.
En el tramo final recuerdo que prácticamente estaba atrapado por mis propios cabos que no daban más de sí. ¡Atención!
Por ahí abajo está La Hermida.
Ya en las rampas de escape se respira de otra manera.
En estas, con buen zoom desde la Hermida, se vislumbra / intuye el hilo colgado al vacío por el que he pasado.
E n j o y y o u r s e l f !
No hay comentarios:
Publicar un comentario